La obesidad aumenta el riesgo de diabetes, enfermedades cardiovasculares y cáncer (Getty)
Durante el inicio del año legislativo, el presidente Mauricio Macri puso en el centro de escena a la salud. Se refirió a la prevalencia de sobrepeso que existe en Argentina con respecto al resto de la región, y se alarmó por los altos niveles de obesidad infantil. Además, destacó que es uno de los países en donde más azúcar se consume en el mundo.
“En Argentina cuatro de cada diez chicos están mal nutridos. Somos el país con mayor obesidad infantil en América Latina”, aseguró el mandatario, y agregó: “Somos uno de los cuatro países que más azúcares consumen en el mundo”.
Es que la Argentina lidera el porcentaje de obesidad en menores de cinco años en América Latina, según datos de la Organización Mundial de la Salud(OMS). Según un análisis realizado por FIC Argentina en colaboración con Unicef Argentina en 2015, se identificó una asociación entre la prevalencia de sobrepeso y la pobreza: los adolescentes de bajo nivel socioeconómico presentan un 31% más de probabilidad de tener sobrepeso.
Es decir que la obesidad y el sobrepeso son hoy una problemática que afecta a los estratos con menos recursos.
Según el Panorama de la seguridad alimentaria y nutricional en América Latina y el Caribe 2017, publicado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS), el sobrepeso y la obesidad afectan a todos los grupos de edad en hombres y mujeres, y es un problema de salud pública en todos los países de las Américas.
De acuerdo a los datos dados a conocer en el informe, en Argentina, el 30,1% de las mujeres sufre obesidad contra el 26,7% de los hombres.
El impacto de la epidemia es alarmante. Además de riesgo de diabetes, enfermedades cardiovasculares y cáncer, la obesidad infantil genera casos de bullying y dificultades para insertarse socialmente, entre otras problemáticas.
“El tejido adiposo que se acumula en la zona del abdomen es un importante factor de riesgo para el desarrollo de enfermedades cardiovasculares, diabetes, hipertensión arterial y varios tipos de cáncer”, afirmó en diálogo con Infobae el médico cardiólogo Hernán Provera, coordinador de prevención cardiovascular de INEBA.
Para luchar contra esta problemática, el Ministerio buscará implementar una serie de medidas, como impuestos y demás políticas fiscales que desalienten el consumo de bebidas azucaradas para que se sustituyan con agua segura, además de políticas que tienen que ver con el etiquetado de los alimentos, el etiquetado frontal, las advertencias sanitarias de aquellos alimentos que no son saludables porque son altos en azúcares o grasas.